Los dueños de mascotas somos responsables de la correcta nutrición de nuestros hijos peludos. Por un lado, buscamos la mejor calidad de la comida que les damos diariamente, pero no menos importantes son los snacks y a veces les prestamos menos atención aunque se los demos frecuentemente. El símil es el siguiente, todos los días nosotros comemos una buena ración de ensaladas, proteínas y arroz integral, pero después nos zampamos una barra de caramelo del más puro químico procesado. Entonces, revisemos esta pequeña guía para tratar de balancearnos o no morir en el intento.
Primero, ¿cuándo debemos darles premios a nuestras mascotas?
Lo importante es saber que no podemos desajustar su balance nutricional con lo que darle todos los días sin un fin específico no debería ser la regla. Ya ni siquiera por la nutrición sino porque los premios tienen el fin de ayudarnos con la educación de nuestras mascotas. Si se los damos ‘de gratis’ pierden su propósito y podríamos tener problemas de comportamiento y control.
Entonces ¿cuándo? Si está en proceso de aprender algo nuevo, pues en sus momento de aprendizaje. Cuando haga sus necesidades donde debe; cuando cumpla correctamente comandos como sentarse, detenerse, callarse; cuando termine su comida; cuando salude correctamente a otros perros. Si se trata de un perro ya educado, se utilizan mucho para juegos de olfato (esconderle premios alrededor de la casa), cuando viene visita y queremos que los trate bien, etc.
Entonces, ¿qué no debo darles?
Comienzo por acá porque no quiero que se vayan sin que quede claro que NO LES DEBEMOS DAR CARNAZAS. La FDA lleva muchos años emitiendo alertas para evitarlas https://www.fda.gov/consumers/articulos-en-espanol/por-que-las-carnazas-de-carne-seca-estan-enfermando-las-mascotas donde no solo causan enfermedades a las mascotas pero inclusive la muerte ya que esa sustancia es agradable para masticar pero terrible para digerir pues muchas están hechas de huesos molidos.
Pero aún con esta información nunca falta el dueño que dice “es que a mi perro no le pasa nada”.
Otros snacks que resultan muy peligrosos son los que venden en supermercados. Para lo cual tenemos que prestar mucha atención a los ingredientes y evitar por supuesto los ultraprocesados, pero para ser más específica los que diga la palabra SUBPRODUCTOS. Básicamente se califica como SUBPRODUCTO todo lo que no es apto para el consumo humano como pueden ser uñas de pollo, plumas, pico. Básicamente toda la ‘basura’ que se desecha, es económica y los productores la utilizan para dársela a los animales en productos baratos
Pero y ¿qué snacks puedo darle?
– Los que haces en casa: Puedes hervir tus propios hígados de pollo, mollejas y verduras si le gustan. Los favoritos de mi perra, por ejemplo, son las zanahorias. Lo natural y fresco siempre va a ser mejor.
– Deshidratados: Numerosas empresas han girado hacia este negocio y es que no se trataría más de retirarle el agua a productos que los humanos también consumimos como pechuga de pollo, patas de pollo, hígado, zanahoria o camote. De hecho, si tu preocupación era tener un snack que fuera casi tan duro como la carnaza para tener a tu mascota entretenida, puedes ir hacia la oreja o nariz de cerdo y los huesos GRANDES como brazuelo de cerdo o hueso manzano.
– Los limpiadientes: Son una buena opción aunque no quita que sean ultraprocesados, con lo que utilízalos con moderación.
– Pastelería casera: Si las galletitas se las preparas tú mismo no hay pierde pues hay varios ingredientes que ellos adoran y que todos tenemos en casa, como la avena, el plátano o la crema de maní. ¡Recetas hay miles!
Solo recuerda, le des lo que le des, siempre lee los ingredientes.
