Las pulgas en los perros son uno de los parásitos más frecuentes, la mayoría de los perros ha tenido pulgas en algún momento. Sin embargo, que sean frecuentes no significa que no sean peligrosas y que no debamos prevenirlas. Algunas mascotas son más sensibles a la saliva de la pulga que otras por lo que se puede desarrollar una alergia o caída de pelo por rascarse intensamente. Si la carga de pulgas es importante, la pérdida de sangre podría ocasionar anemia a tu mascota, la cual se manifiesta con palidez, debilidad y decaimiento. En estos casos, es importante llevarlo a un veterinario para que realice el tratamiento adecuado.
En muchos casos, la picadura de la pulga es solo eso, una picadura que fastidia a tu mascota y ocasione que se rasque. En otros casos, este parásito, además de alimentarse de la sangre de otros seres vivos, tiene capacidad de transmitir enfermedades, ya que son portadoras de microorganismos malignos.
Algunas de las enfermedades que transmiten las pulgas a las mascotas son:
- Tenia: la tenia o solitaria es un gusano plano que se instala en los intestinos y puede pasar ahí años, creciendo y creciendo. Algunas especies de tenia pueden ser transmitidas por las pulgas, ya que estas ingieren sus huevos, que pasan al perro si por accidente se come una pulga.
- Micoplasmosis: esta enfermedad la transmiten las pulgas y la causa una bacteria; puede afectar a perros y gatos. Esta enfermedad afecta a los órganos reproductivos y causa esterilidad.
- Peste bubónica: esta enfermedad la transmiten las pulgas que han parasitado en ratas. No se da en todos los lugares del mundo, sólo en algunas zonas de Asia, África y Sudamérica.
- Tifus murino: presente en las pulgas del gato y de la rata. Está presente en áreas poco desarrolladas y con malos recursos higiénicos.
Además, hay que tener en cuenta que estas pulgas, aunque tengan preferencia por los perros y gatos, pueden picar también a los humanos en caso de necesidad. ¡Cuida a tu mascota y tu hogar previniendo las pulgas!
