Seguramente has notado que los gatos siempre caen de pie, pero ¿a qué se debe este sentido del equilibrio en estos felinos? La habilidad de los gatos de caer sobre sus patas depende del llamado reflejo de enderezamiento. Los gatos empiezan a desarrollarlo a partir de la tercera y cuarta semana de vida y lo perfeccionan alrededor de la sexta y séptima. Los gatos que caen al vacío realizan un movimiento giratorio con el cuerpo en el aire que les permite acabar con las patas apuntando hacia abajo, incluso cuando están cayendo de espaldas.
El reflejo de enderezamiento se activa por la estimulación del vestíbulo, que es una estructura sensorial ubicada en la parte interna del oído. Este es capaz de detectar y comunicar al cerebro cuál es la posición de la cabeza y el movimiento del cuerpo. Por ello, la cabeza comienza a rotar para recuperar su orientación habitual y mientras esta gira, el gato retrae sus patas delanteras y estira las traseras empezando así la rotación del cuerpo. Durante la caída también flexiona su columna vertebral. Por último, expandirá sus cuatro patas para frenar la caída y relajará sus músculos para amortiguar.
La habilidad de los gatos para caer de pie también se debe a otras características que influyen, como su estructura ósea, su tamaño y su pelaje grueso que ayuda a disminuir la velocidad a la que caen. Gracias al reflejo de enderezamiento, la mayoría de gatos sobrevive a caídas que serían fatales para una persona.
¿Será esta la razón para que se diga que los gatos tienen 7 vidas?
